PULSERAS SOLIDARIAS : LA PACIENCIA TIENE UN LÍMITE.
La madurez de una nación podemos buscarla en sus
universidades, en su
clase política, en sus
trabajadores...pero si nos fijamos en algo más intranscendente, una parte del cuerpo de los individuos,
las muñecas ( esa cosa indefinida entre la mano y el antebrazo ) uno llega a la conclusión de que
España es un país de pandereta.
¿Por qué? Por las
ridículas, i
nfantiles y
censurables Pulseras Solidarias.
A ver, se

supone que estas pulseras de silicona son
solidarias. Bien, me pregunto ¿
el moro a quien se la compras, en cualquier bocacalle de la
Plaza Mayor o de la P
uerta del Sol, da luego un tanto por ciento de su beneficio a una
ONG? ¿ Se siente mejor una persona de
Sri Lanka que ha perdido todo por la fatal ola por que lleves una pulserita verde donde pone
“no al Tsunami”? ¿es el
SIDA menos peligroso ahora que llevas la pulsera roja
“solidaria”?
¡NO! Y mil veces no, las pulseras esas,
horteras como un pavo rosa moviendo un ula-op , son sólo un
vil y
mezquino negocio. Las hay de todos los temas imaginables: Contra el
SIDA, contra el
cáncer, contra la
Artritis, contra la
Fibrosis Quística, contra
el hambre...incluso contra la
OPA sobre
ENDESA...hay que joderse Pero mi favorita fue la que sacó el periódico católico
ALBA, que rezaba
“100% Católico”...en fin. La silicona está mejor en otras partes del cuerpo.